Tuesday, February 27, 2007

Voladuras de hoy y siempre...

Llegó la hora de volarme y para aquello no necesito un pito. Muchas veces me han dicho que para escribir hay que saber lo que se escribirá y luego traspasarlo a la página. ¿Qué les puedo decir?, eso me complica, para mí el escribir es poseer un lápiz y ser dueña del mundo, incluso dueña de mí misma, pues si no me gusta aplico "borrar" y ya está: no está. Quizás para ustedes lectores les sea complicado entender a lo que me refiero, pues en este momento yo soy la dueña de lo que pienso y siento, por tal, mi situación es facilitarles la lectura y hacer comprender la motivación del escrito.
¿Y cuál es mi motivación?, pues que sepan que no hay nada mejor que entender a lo que me refiero. Hay días en que todo es lindo, que brilla el sol como un destello de oro y quizás hasta el corazón quiera saltar de felicidad, pero como nada es para siempre, llega la lluvia y la tempestad, llega el frío y todos nos encondemos bajo las frazadas esperando a que pase "el mal día". Quizás lo mejor de mi sentimiento, en este momento, es que estoy en la primera fase, pero tema pasar a la segunda. Temo que un día deje de estar así y más nada me quede, que sólo estar baja la colcha de mi cama y esperar el mal momento. Tengo miedo, miedo a que esto se acabe al´gún día. Una vez me pasó ¿Porqué no habría de suceder, nuevamente?
No quiero dejar de volar, no quiero dejar de soñar, no quiero despertar, quiero dormir en el sueño más profundo. ¿Para qué morir? si hoy vivo el cielo, al menos a eso se parece.