Abandonar el nido

Las aves, a penas pueden moverse por sí mismas comienzan a buscar su alimento para sobrevivir, sin embargo, el ser humano pasa más de 20 años con los padres, junto a su familia y aún así no es posible de formar su familia, o lo que es peor, no sabe sobrevivir. ¿Porqué nos cuesta tanto desapegarnos de la familia, del ombligo materno, del financiamiento que te otorgan los padres?, quizás sea la facilidad de vida, la flojera, la falta de ganas, la comodidez... pero siendo la hermana mayor, muchas veces me toca ser la niñera, nana y hasta consejera de mi madre, que me lo confía todo y no sé hasta qué punto eso sea bueno. Cada problema con mi padre, llega a mis oidos, cada problema con el sustento de la casa, pasa por mis tímpanos y lo que es peor aún, la falta de ganas por luchar, el decaímiento, las rabietas y todas las penas que tiene mi madre llegan a mi corazón y eso es lo que más duele.
A veces quisiera abandonar el nido, ya que estoy aburrida de esa situación y más aún de compartir pieza con mi hermana, que es ultramente desordenada, floja y casi no hace nada. No sé qué cambio hubo entre los años 87 y 90 que mis hermanos salieron más cómodos, flojos y poco cooperadores y yo, muchas veces, he tenido que cargar con aquellas situaciones. Tampoco me quejo, nadie me obliga (aunque me sienta en la obligación) ayudar, menos aún creerme "la mamá", mi mamá hace bien su trabajo solo que conmigo, que ya soy grande, cree que puedo consumirlo todo, cree que puedo ser hija y amiga a la vez... por eso es que muchas veces quisiera abandonar el nido, porque estoy aburrida. Me gustaría tener mi independencia, mi privacidad y mi intimidad, para poder sentirme madura, quizás algo así me hace falta, quizás con ello logro descubrirme o quizás quiero sólo despejarme de mi familia... quién sabe.
Lolach