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Personalmente, jamás había apreciado una exposición con tanta admiración y delicadeza, quizás fue por el "interés del tema", o por pura monería, la cosa es que estuve ahí mirando cada historia, cada rostro y cada fotografía que me contaba una realidad distinta.
Esa es una cosa que puede captar la fotografía, que se le va a la televisión y con palabras no podemos decir, captar el momento justo y preciso que cuente más de una historia, en donde muchas miradas puedan ver cosas distintas, no así la misma del autor, que muchas veces impresiona con su afán de busqueda. Busqueda de contar o mostrar algo, busqueda que encontramos por medio de la realidad reflejada en una cámara fotográfico.
Pepe Bonet, nos incita a mirar África desde la perspectiva del dolor, de la salubridad, higiene y deficiencia en estos conceptos, desde la mirada del tan temido virus del SIDA. Un tema que los chilenos lo vemos lejano y muy poco probable, pero está ahí en la puerta, hay que tener cuidado para no abrirsela."Mala suerte", dirán algunos, el SIDA es una enfermedad que no discrima y mortalmente tampoco.
La exposición, que se presenta en el Centro Cultural de España, desde el 6 al 29 de agosto tiene dos etapas. Una constituida por la imagen en blanco y negro, donde recrea, a primera vista, la vida en el hospital y lo difícil que es llevar consigo la enfermedad. Muestra una realidad cruda, la que es muy fácil dejar de lado. Es más fácil mirar que ser mirado, donde los personajes se ven tristes, sombríos, creando el efecto del sentimiento que podría tenerse a raís de esta enfermedad. Además, trabaja con el efecto del diafragma, difuminando algunas escenas posteriores a la imagen central, la que el autor desea destacar.
Por otro lado, están las imagenes a color que rescatan la realidad en la calle, en el hogar, junto a los suyos. La idea del color, es decir "estamos enfermos pero no muertos y luchamos día a día para seguir viviendo, lo más felizmente... posible" Por esta razón, el color entrega una cercanía, una etapa de enfrentamiento de la enfermedad, en donde algunos logran salir adelante, tratando de luchar día a día, hasta que la vida diga "ya no más".
Entre las imagenes de color, se puede apreciar una que me impacto mucho. Dos muñecos de color negro, están sentados en un sillón, medio sonrientes y con los ojos desorbitados, quizás es la imagen de los muñecos nada más, pero representan muy bien la imagen de la utilización de estos juguetes: explicar cómo se produjo la violación. Más abajo, se podía leer algo así como "estos muñecos son utilizados para que los niños puedan explicar de que manera fueron violados". Una fuerte y cruda realidad, más aún con el SIDA deambulando por las calles. Entres las actividades de los pequeños, se destacaba la de las niñas quienes realizaban comercio sexual, algunas avergonzadas no mostraban el rostro, otras disimulaban una sonrisa con unos enormes ojos que señalaban la tristeza de una pequeña que necesitaba ser acogida por una madre.
Un realidad así, tan lejana, es bueno apreciarla con los ojos chilenos, quizás para entender a los VIH+, quizás para entender la cultura de otros mundos, etc. ¿Qué es lo que quizo demostrar Bonet a partir de esta exposición?, ¿amargura, desolación, desesperación, enfrentamiento?...

Lolach